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Mi cuerpo recordaba lo que mi mente había olvidado

Diario de una Consteladora – Por Katheryne J. Robles


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Durante un tratamiento médico, me costaba muchísimo tomar las pastillas.


No era una, ni dos veces. Era cada vez.


Tenía que partirlas, molerlas, y aún así… tragar una pastilla era un martirio.


Mi mente decía: “vamos, tómatela, es solo una pastilla”.


Pero el cuerpo… NO podía.


El MIEDO a ahogarme era más fuerte.


Me daba vergüenza.


Me sentía ridícula.


¿Cómo una mujer adulta no puede tomarse una simple pastilla?


Hasta que un día, almorzando en familia, llegó una frase que me despertó.


Mi mamá me miró y me dijo:


Tal vez tienes miedo porque de chiquita casi te ahogas con una moneda.

Y PUM!!


Algo en mí hizo clic.


Ya yo era consteladora y mi mamá estaba estudiando constelaciones también.


Me miró con amor y me dijo con toda su ternura:


“Esa moneda con la que casi te atragantas te lastimó…

Pero las pastillas no te harán daño.

No te estás metiendo una moneda a la boca.

Te estás tomando algo que te va a hacer bien.”


Y fue suficiente.


Con esa frase sanadora, mi mamá le habló a mi INCONSCIENTE.


Y el cuerpo lo creyó.


A partir de ahí, pude tomar las pastillas con naturalidad.


Dejé de masticar con miedo.


Volví a nadar con más confianza.


VOLVÍ A MÍ.

Hoy, en proceso de post parto, tomo mis vitaminas como si nada.


Porque entendí que ese suceso estaba en el pasado.


Ya no soy esa niña.


Ahora lo sé… y mi cuerpo también.


El cuerpo no olvida...


Muchas veces, no sabemos de dónde viene una DIFICULTAD.


Nuestra mente racional dice: “NO tiene sentido tenerle MIEDO a esto”.


Pero el cuerpo dice: “SÍ lo tiene… yo estuve AHÍ”.


Porque todos los traumas se guardan en el inconsciente.


Y el inconsciente es atemporal.


No distingue entre pasado o presente.


Cree que lo que pasó, sigue pasando.


Por eso, si le dices con claridad: “eso ya NO está ocurriendo”, él lo cree.


Y si le dices: “esto es peligroso, esto es igual a aquello”, también lo cree.


Mi mamá le habló a mi inconsciente.


Y eso bastó para que dejara de luchar contra mi propio cuerpo.


Desde el enfoque sistémico, todo lo que NO ha sido INTEGRADO en la infancia, puede BLOQUEAR nuestro presente.


Las constelaciones familiares le hablan al inconsciente.


NO a la mente racional.


Le hablan al ALMA.


Por eso cuando tienes un miedo que “no tiene sentido”… es probable que tenga una raíz antigua que sí lo tiene.


A veces es tuyo.


A veces es HEREDADO.


Pero siempre puedes SANARLO.


Y cuando NO lo sanas, lo más probable es que lo heredes.


Ese miedo era mío.


Y lo pude LIBERAR.


Y hoy sé que no pasará a mis hijos...


¿Quieres liberar tú también un miedo del pasado? Te dejo aquí un ejercicio sanador para ese miedo que te bloquea, lo hice con todo mi amor para ustedes.


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En el Pack Sanar para Prosperar trabajamos este tipo de bloqueos desde el alma, el cuerpo y el sistema familiar.


Y si sientes que tu historia es muy personal, puedes también constelarla en sesión individual.


Tu miedo tiene RAÍZ, pero también tiene salida. Y esa salida es AMOR Y CONCIENCIA.

Y recuerda:

Lo que se ordena adentro, florece afuera.


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